Mytilus galloprovincialis, Lamarck 1819
El mejillón es un molusco de agua salada, marisco muy popular en todo el mundo debido a su delicioso sabor y su versatilidad en la cocina.
El más consumido, en la península ibérica, es el mytilus galloprovincialis, criado en Galicia, que año tras año supera la producción y venta del año anterior.
Su consumo es muy habitual, en muchas culturas culinarias.
Como comprar mejillones
Los mejillones los encontraras, en tu pescadería favorita, vivos y disponibles a granel.
Esto significa que los pediremos según nuestra necesidad de consumo.
Podremos pedirlos por peso o por unidades.
Al comprar mejillones, asegúrate de que las conchas estén cerradas y que no estén rotas ni agrietadas.
Si las conchas están abiertas, toca ligeramente la concha y si se cierra de inmediato, está vivo y es fresco.
Si no se cierra, no lo compres.
Los mejillones vivos se aferran fuertemente cuando se les incomoda.
También podemos encontrar los mejillones envasados
En tu pescadería favorita, también podrás encontrar los mejillones envasados y en los siguientes formatos:
Vivos y limpios.
Cocidos al vapor en su jugo.
Cocidos al vapor con tomate.
En escabeche.
En escabeche picantes.
A la brasa.
Al natural.
En salsa marinera.
Mejillones en salsa vieira.
En salsa gallega.
Si no los encuentras, tienes varias opciones:
Una opción sería encargárselos a tu profesional de referencia.
Otra opción sería comprarlos a través de internet, pues hay muchas empresas ofreciendo el servicio online y a domicilio.
Como conservar el mejillón en casa
Una vez que llegues a casa, retira los mejillones de la bolsa o recipiente en el que vinieron y colócalos en un recipiente grande y poco profundo.
Lava los mejillones con agua fría corriente para quitar cualquier suciedad o arena que puedan tener en sus conchas.
Descarta cualquier mejillón que tenga la concha rota o que no se haya cerrado después de enjuagarlo.
Cubre los mejillones con un paño húmedo o papel de cocina húmedo para mantenerlos frescos y húmedos en el refrigerador.
Los mejillones se pueden mantener en el refrigerador hasta 2-3 días después de su compra.
Es mejor cocinarlos lo antes posible, después de la compra, para garantizar la frescura y calidad.